La distribuidora quiere regularizar a quienes tienen conexiones clandestinas instalando medidores que funcionan con el sistema de carga previa.
La distribuidora de electricidad Edenor buscará regularizar la situación de alrededor de 300.000 usuarios que tienen acceso a su servicio a través de conexiones clandestinas, a través de la instalación en los sectores poblacionales más carenciados de su área de servicio de medidores integrados de energía que funcionan bajo el sistema de recarga previa. Así lo anunció hoy la compañía al presentar la nueva imagen corporativa de la distribuidora, en un encuentro con la prensa que mantuvieron el presidente de Pampa Energía, Marcelo Mindlin, y el titular de Edenor, Ricardo Torres.
En el encuentro con la prensa ratificaron la inversión por 1.800 millones de dólares comprometida en la Revisión Tarifaria Integral para el período 2017-2021, de la cual el 6 por ciento ya fue ejecutada y el 20 por ciento está en ejecución, en el proceso de recuperar la calidad de servicio, renovar las instalaciones y acompañar el desarrollo de la demanda,
Así, por el compromiso asumido tras la revisión tarifaria realizada en octubre de 2016, Edenor incorporará a lo largo del quinquenio 24 nuevas subestaciones, 7.000 kilómetros de red, 2.000 puntos de telecontrol, medidores inteligentes y 3.500 centros de transformación. Mediante las obras en marcha, el director de Operaciones de Edenor, Eduardo Maggi, aseguró que la empresa está «logrando este año una reversión en la tendencia negativa de la frecuencia y duración de los cortes», y resaltó que las medidas «apuntan a retornar en 2021 los valores de calidad de servicios históricos y que se encuadran en los parámetros internacionales aceptados».
Fuente: Télam